Un paseo por el Guadiana

1. No es fácil ponerse a escribir  con este calor agobiante que tenemos  pero con la ayuda del ventilador voy a describir para el recuerdo un paseo muy bonito que hemos hecho por el Guadiana. Salimos el día veinticinco por la mañana temprano a esa hora que nos hace olvidar el calor de la tarde. Desayunamos en un area de servicio a la altura de Bonares, seguimos por autopista de Portugal llegando al muelle de Ayamonte  con un viento de carabana y un fresquito estupendo, subimos a un barco típico de turismo cuidado y cómodo ya nos cuesta trabajo salir a los que contamos los años por docenas pero tambien ha sido muy gratificante  y al mismo tiempo  doy gracias por haber podido hacer una excursión una vez más.  La desembocadura del Guadiana  al mar es preciosa,  a un lado Ayamonte y al otro San Antón.  Sentada con mis amigas en los sillones pues nos daba miedo salir a la cubierta por el oleaje,  veiamos pasar el  paisaje ta variado entre árboles y montes con pequeños pueblecitos a la orilla de lo más pintoresco, con un poco de imaginación te hacias la idea que ibas por el Danubio ja ja , sobre todo,  cuando empezó la animación y pusieron valses y boleros   y música clásica , los más jovenes bailaron de lo lindo en cubierta y los mayores tambien la desfrutamos, lo malo fue cuando empezaron con las salsas,  que ya no estamos para esos trotes.  Alas doce, sirvieron  un aperitivo: gambas, embutidos variados con la correspondiente bebida.  Despues, seguimos rio adelane hasta llegar a Alcautín un pueblo bonito de Portugal donde predomina el turismo, alli, almorzamos en un restaurante  cerca del embarcadero  buena comida con el tipico bacalao a la portuguesa. Algunos del grupo bajaron a la playa que no es playa sino un meandro que hace el rio y lo ha cuidado como atractivo para los visitantes.  A las cuatro bajamos al barco, no hacia calor  debido al oleaje pues, el Guadiana lleva mucho caudal debido a la lluvia de primavera  y así llegamos rio abajo hasta el muelle de Ayamonte, el autobus no pudo llegar a recogernos pues habia una procesión de virgenes por el pueblo celebrando no se que acontecimiento de hace veinticinco años con musica y toda esa parafernalia por la calle.  Debido a esto nos llevaron en taxis  hasta el autobus  que quedaba lejos.   Llegamos a las nueve contentos y buena convivencia  pues ya por nuestra edad no necesitamos mucho para pasar un buen día.  Pero que calor señor nos encontramos.