De mi viaje al valle del Jerte

De mi viaje al Valle del Jerte podría escribir muchas páginas por lo mucho que contiene en historia y en cultura, pero voy a recordar solo lo más interesante. Salimos una mañana del mes de abril por Ruta de la Plata camino de Extremadura, el tiempo invita a salir ya que hemos tenido un invierno muy crudo. A través de los cristales del autobús me encanta ver el paisaje. Los campos están preciosos en plena primavera (sólo las personas que hemos vivido de él podemos apreciarlo). Las tierras fértiles de Extremadura con sus sembrados, árboles y arroyos donde la contaminación tiene un límite es una delicia contemplarlos y así hemos llegado a Mérida donde desayunamos en un hostal de carretera. Seguimos adelante, llegando a Cáceres a las diez, ahí hemos visitado el centro histórico. Cáceres, es una ciudad preciosa, hay que verla despacio. Fue declarada patrimonio de la humanidad en 1986 ya que es uno de los conjuntos urbanos de la edad media y del Renacimiento más completos del mundo. La Catedral de Santa María, el Palacio de las Veletas, los Palacios de los Golfines, la Casa del Sol, la Torre de Buljaco y el arco de la Estrella, son algunos de los monumentos más bellos y admirables. Asimismo destaca la Universidad, conjunto cultural de la Comunidad autónoma de Extremadura. Y llegamos a Plasencia a las dos al hotel Cañada Real en Malpartida, el hotel sencillo, confortable y muy limpio. Malpartida, es un pueblo de la provincia de Cáceres muy cerca de Plasencia con 4445 habitantes en él se han encontrado restos arqueológicos muy importantes. Descansamos un poco después de comer y hemos salido a visitar Plasencia. Ciudad noble: fue fundada en el año 1186 cuándo el rey le concede el titulo de ciudad y esta máxima que figura en su escudo: “Para el placer de Dios y de los hombres” y en 1901 la reina Mª Cristina le otorga el titulo “De la muy Benéfica” por haber contribuido en la evangelización del Nuevo Mundo y haber legado a la humanidad monumentos que sobrecogen, sobre todo la Catedral Nueva al lado de la vieja, comenzada en 1498 por el obispo Gutiérrez Álvarez de Toledo. Predomina su estilo gótico con pinturas retablos y obras de arte que me es imposible detallar. En la vieja se destaca el estilo románico aunque está menos cuidada conserva sobre todo la capilla de San Pablo popularmente conocida como (la torre del melón) por la terminación de su bóveda en una bola, solamente hay cuatro torres del mismo modelo en Europa: en Zamora, Salamanca, Toro y Plasencia, su origen se remonta al siglo XIII hay restos del Neolítico con pinturas y grabados de mucho interés cultural. Volvimos al hotel, cenamos y nos retiramos a descansar que en verdad lo habíamos hecho bien. Día 13, hemos amanecido con un día espléndido de primavera, salimos a las diez camino de Yuste. Precioso el recorrido con los campos llenos de flores y los cerezos en flor. Llegamos al Monasterio de San Jerónimo que está situado en la localidad de Cuacos y Garganta la Olla. Sus comienzos vienen de 1402 donde personas muy relevantes del Clero influyeron en su construcción. Sus dos claustros son una maravilla, uno gótico y otro renacentista como parte del conjunto monumental del Monasterio. Sus jardines y su entorno en plena naturaleza es una delicia para el alma. El Emperador Carlos V eligió este lugar para pasar sus últimos años, no pudo elegir otro sitio mejor para la paz y la meditación, y aquí terminó su vida aquel rey que tuvo el imperio más grande que conocieron los siglos. Murió el 21 de septiembre de 1558. Llegamos al hotel a las dos, después de descansar salimos a ver el Valle del Jerte, es precioso ver el valle con los cerezos en flor, más de un millón y medio de cerezos ofrecen un espectáculo difícilmente comparable, hecho en bancales, esto es, escalones, y abajo el rio Jerte donde una cascada de agua da comienzo al rio, un puente sobre el río une los laterales del valle. Me apoyé en la baranda del puente y estuve un rato contemplando aquella maravilla de la naturaleza, y mi mente volaba lejos recordando a mi marido, ¡cuánto hubiese disfrutado él, tan amante como fue de la naturaleza y el campo! Frente, la sierra de Gredos cubierta de nieve en la altura, a un lado Jerte y al otro Béjar. Bonita la comarca de la Vera, la componen 19 municipios que mi libreta ambulante no alcanza a la guía. Y volvimos a Malpartida después de pasar un día estupendo. Día 14, vamos ya de regreso y esta mañana vamos camino de Guadalupe después de atravesar la comarca de la Vera con curvas impresionantes. Llegamos a Guadalupe a las 10 y hemos visitado el Monasterio, no puedo describir todo cuánto contiene si no mi libreta seria una enciclopedia. Su historia se remonta a 1389 cuándo en un arroyo llamado Guadalupe fue encontrada la imagen de la Virgen por un campesino (según la leyenda) a finales del siglo XIII y es entonces, cuándo se empieza a construir el Monasterio junto a una pequeña aldea al lado del arroyo, de ahí su nombre. El rey Juan I de Castilla le otorga el privilegio a la Orden de San Jerónimo, el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe y su construcción parte de los jerónimos. Se comenzó en el siglo XIII y XIV hasta el XVIII respectivamente, por eso tiene varios estilos gótico, mudéjar, renacimiento, etc. En él están sepultados miembros de la realeza desde Enrique IV hasta Inés de Castro. Contiene cinco museos, Me llamó grandemente la atención el de bordados hechos por los mismos monjes preciosa la labor de pura artesanía. Lo inauguró el rey Alfonso XIII en 1928. El de pinturas, con cuadros de Zurbarán, Goya, el Greco y otros más, pintores de renombre universal. Los libros incunables escritos en piel de cordero cuándo no existía el papel, me es imposible describir toda la obra cultural de arte que encierra el monasterio. Y termino con la capilla de la Virgen ha sido edificada tres veces a lo largo de su historia, por eso tiene varios estilos. Sentí una gran alegría verme delante de la Virgen, solo le pedí la paz del mundo que tan necesitado está y la salud para todos. Es la patrona de Extremadura y de Méjico donde la llevaron los grandes conquistadores extremeños y una de las imágenes más veneradas del mundo. Por delante de la fachada principal hay una fuente de piedra muy bien conservada donde Colón gran devoto de la Virgen, bautizó a los indígenas que trajo del Nuevo Mundo antes de entrar en el Monasterio. El pueblo está muy concurrido con este puente de primavera después del mal tiempo que hemos tenido. Después de dar una vuelta por tiendas de regalos, hemos comprado pimentón de la vera y pan riquísimo como el de mi pueblo por algo descendemos de ahí. Comimos en un restaurante en la plaza donde nos pusieron migas extremeñas riquísimas y segundo caldereta de cordero (no se puede pedir más). Hemos salido a la cinco otra vez por Ruta de la Plata parada en Monasterio y seguimos sin parar hasta el centro del universo. Ha sido un fin de semana estupendo con muy buena convivencia y buenas compañeras con quien he compartido, aunque en mi alma lleve siempre el vacio de tu ausencia.